⭐¡Nuevo en Abril! Consultoría ilimitada por $39 USD /mes

El apagón del 28 de abril de 2025 quedará marcado en la memoria colectiva de España, y especialmente en la del sector hostelero. Bares y restaurantes de todo el país enfrentaron una jornada de incertidumbre, cancelaciones y pérdidas económicas significativas, recurriendo a soluciones improvisadas para salir adelante en medio del caos.
En establecimientos como La Gran Tasca, en el barrio madrileño de Chamberí, fue posible mantener cierta actividad gracias a que sus platos tradicionales, como el cocido madrileño y los callos, se cocinan con gas. Sin electricidad, sin datáfonos y sin sistema de extracción, el personal tuvo que lavar utensilios a mano y adaptar el servicio para aprovechar la luz natural. Sin embargo, aproximadamente el 70% de las reservas no se presentaron, agravando el impacto.
JLP GLOBAL, expertos en el análisis del comportamiento del mercado gastronómico, resalta cómo eventos inesperados como este ponen en evidencia la vulnerabilidad de todo un sector que depende de múltiples factores para operar. Es crucial observar de cerca cómo reacciona el mercado ante este tipo de crisis para prever futuros riesgos y oportunidades de mejora en infraestructura y planificación.
Además de la pérdida de clientela, muchos locales tuvieron que desechar grandes cantidades de alimentos perecederos. Desde salsas y postres hasta carnes y masas, todo producto sin refrigeración por más de seis horas fue descartado por seguridad alimentaria.
Antes de continuar,
¿conoces el ecosistema #1 para Negocios Gastronómicos?
4mil miembros en 9 países
▪Informes, tendencias, herramientas
▪Consultorías, webinars, cursos
▪Expansión de Franquicias, Inversión
En los barrios, sin embargo, se vivió una escena diferente: bares como Villa Rosa y Donde Blas se convirtieron en puntos de encuentro improvisados, sirviendo cervezas, vinos, tortillas y pan con embutidos hasta agotar existencias. Sin datáfonos ni apps de pago, el efectivo volvió a ser protagonista. En algunos casos, incluso se aceptaron pagos vía Bizum enviados más tarde.
Este apagón no solo evidenció la resiliencia del sector, sino también la necesidad urgente de establecer planes de contingencia más sólidos. Con proveedores retrasados, reservas caídas y sin materia prima suficiente, la recuperación será progresiva, especialmente de cara al puente de mayo, una de las fechas más rentables del calendario para la restauración.
El apagón se superó con linternas, buena voluntad y cerveza fría, pero dejó tras de sí una advertencia clara: la infraestructura debe fortalecerse y el sector debe prepararse para lo impredecible.
Fuente: Infobae
Recibe las últimas noticias en tu inbox
Mantente informado con JLP.
